Chile: «Si vamos lento, llegaremos lejos»

EN UNA LARGA MARCHA QUIÉN SE APURA LLEGA TARDE

Por Rubén Andino Maldonado (*)

La reunión sostenida en el marco de APEC entre los presidentes Xi Jinping de China y Gabriel Boric de Chile estuvo caracterizada por significativos gestos de buena disposición para profundizar los lazos bilaterales entre ambos gobiernos, en un contexto de creciente inestabilidad en las relaciones internacionales y de intentos proteccionistas de parte de algunas de las economías industrializadas. El presidente Xi pidió a su homólogo chileno reforzar la cooperación en áreas cómo el uso de energías limpias y tecnologías de la información y comunicación, el libre comercio y una política industrial más abierta; el mandatario chileno señaló: “Nuestra relación sería efímera si fuera sólo comercial, tenemos que ir más allá…”. Esta fue la tercera oportunidad en que ambos líderes se reúnen desde que Boric es presidente de Chile.

En 2024 la relación de intercambio se ha hecho más variada, abarcando aspectos, como: electro movilidad, investigación científica y tecnológica, agricultura, alimentación, astronomía, exploración antártica e intercambio cultural. En 2025 el 50% de la Región Metropolitana de Santiago será operada por autobuses eléctricos de origen chino y se espera que esta presencia se incremente en el futuro. También se han firmado recientemente protocolos que facilitarán el ingreso de frutas frescas y carnes chilenas al mercado chino. En abril de 2024 una delegación de alto nivel de la Universidad de Chile visitó diversas instituciones científicas y universidades en el
país asiático, estableciendo diversos memorandos de entendimiento para la cooperación en investigación en áreas como: astronomía, astrofísica, acuicultura, salud, arte público, patrimonio, diseño urbano, desastres, propiedad intelectual, y energías renovables Cuando ambos se aprestan a conmemorar los 55 años de relaciones diplomáticas ininterrumpidas y 20 desde la suscripción del primer tratado de Libre Comercio entre los dos Estados, los cancilleres, Wang Yi y Alberto Van Klaveren, se reunieron de Beijing, en diciembre de 2024, para
concretar acuerdos que facilitaran el intercambio de bienes y servicios entre ambas naciones. El canciller chino destacó a Chile como un socio estratégico y fiable en América Latina, y su colega chileno reiteró el apoyo para el ingreso de China al Acuerdo Integral y Progresivo de Asociación Transpacífica (CPTPP) y el Acuerdo de Asociación para la Economía Digital (DEPA), tratados que refuerzan la inserción de China al libre comercio y la integración global. Es importante consignar que la apertura al libre comercio es también de interés para el gobierno chileno, dado que al ser Chile un país pequeño y con un mercado interno reducido, las oportunidades para sus productos están principalmente en el exterior.

El principal interés chino se centra en realizar inversiones que permitan reforzar a Chile como plataforma de intercambio comercial de productos y servicios de China hacia otros países de América Latina en el contexto de la llamada “nueva ruta de la seda”, estrategia de expansión que busca consolidar al país asiático como potencia económica global. El interés de Chile, por otra parte, se concentra especialmente en diversificar el intercambio económico, avanzando desde la exportación de productos primarios y comodities, como cobre o litio, a bienes con mayor grado de valor agregado y elaboración industrial, además de fortalecer el intercambio en áreas estratégicas del conocimiento, como: educación, ciencia, tecnología y cultura, para potenciar un desarrollo
chileno más equilibrado y equitativo.

No todo ha sido color de rosa en las relaciones comerciales entre ambas naciones. En 2021 el gobierno de Sebastián Piñera anuló una licitación para la fabricación del nuevo pasaporte chileno, adjudicado inicialmente al consorcio sino-alemán Aisino-Mühlbauer, debido a la amenaza velada del gobierno de EEUU de revocar la Visa Weiver, franquicia que permite a ciudadanos chilenos acceder al país norteamericano sin visa ordinaria. Aisino dejó de operar en Chile luego de este incordio. En 2001, el laboratorio chino Sinovac Biotech informó su decisión de instalar en el país sudamericano una planta para la producción de vacunas y un centro de investigación sobre la especialidad, con una inversión de 100 millones de dólares para producir 50 millones de dosis anuales de vacunas; aunque ya había adquirido los terrenos en los que se emplazaría la industria,en 2023 Sinovac anunció que desistiría del proyecto por motivos de mercado. En septiembre de 2024 la empresa china volvió a reactivarlo, luego que inscribieran ante el Ministerio de Salud las vacunas contra la hepatitis A: Healive y Healive Pediátrica, cuya aprobación definitiva todavía sigue pendiente en el Instituto de Salud Pública (ISP) de Chile. Con estos permisos, el negocio comenzaría a ser rentable para Sinovac, que tiene previamente aprobadas

(*) Periodista Chileno.

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